viernes, 30 de abril de 2010

LEJANÍA

Ahora estoy excitado, loco de contento,
me puse a decir cosas y nació un poema.
Después me sacudí las últimas cenizas de la muerte
y me puse a mirar la lejanía y, algo me estremeció.

No fue una luz de fuego, ni el dolor de la guerra,
ni del futuro las artes y las ciencias luminosas.
No vi cuando miré la lejanía la caída del mundo.
Ni bombas atómicas, ni láser asesino, ni venenos.

No vi al hombre en soledad encerrado en sí mismo.
Ni a la mujer crucificada queriendo ser nuevas religiones.
No vi familias encadenadas o muertas o estados corrompidos.

No vi niños raquíticos ni jóvenes drogados o perdidos.
Ni me vi, a mí mismo, viejo, con barba blanca, escribiendo.
Lo que vi fue, sencillamente, la lejanía y, eso, me estremeció.


Miguel Oscar Menassa
De "La patria del poeta", 1991
e-libro.net

lunes, 26 de abril de 2010

RECITAL DE POESÍA

RECITAL POÉTICO DE

Miguel Oscar Menassa
Candidato al Premio Nobel de Literatura 2010

Jueves, 29 de Abril de 2010
a las 20:00 h

Asociación de Artistas y Escritores de Madrid
C/Leganitos, 10 - 1º dcha.
Madrid (Metro Plaza de España)


POESÍA 2000

Deshojados rumores del tiempo
se abanican sobre mi cuerpo ya dejado de lado.

Son instantes que huelen a podrido, a carne agusanada.

Dejo volar mis manos
y el fin de siglo se conmueve por la pureza de mis gestos.

El apocalipsis esperado era esta página.

En medio de la guerra,
en medio de la guerra atómica,
en medio de otras guerras,
la guerra sucia, la guerra fría.
En medio de la droga, la pólvora,
la mutilación, la muerte,
el sida silencioso,
ha nacido el poeta.

Aquí me tenéis, soy el ejemplo posible.
En medio exacto de la locura universal,
vivo, no padezco de nada y cuando canto,
es una carne ajena la que canta en mi voz.

Soy los arrebatos inquietantes de la lengua,
una serpiente aligerada de su propio veneno,
sólo el movimiento de reptación al infinito,
luces perdidas negros senderos del silencio.

Soy un humano terrestre, lleno de algarabía,
la luz, que se bebe el futuro para contarlo.
Voz sin ecos, equilibrada voz sin ecos, voz.

El hombre me esperaba, suave caricia desgarrada,
que dejará en el inocente terráqueo sin medida,
sonora resonancia abierta, huellas de libertad.

Miguel Oscar Menassa
De "La patria del poeta"

jueves, 22 de abril de 2010

Homenaje a Miguel Hernández.

Por integrantes de los Talleres de Poesía Grupo Cero

en el café Figueroa el 17 de abril de 2010

miércoles, 21 de abril de 2010

14 de abril de 2010 en Ámbito Cultural de El Corte Inglés de Málaga

Coloquio con Miguel Oscar Menassa,
director, guionista y actor del cortometraje
“El hortelano”


P: No sé si he captado lo que quería decir el corto y era para preguntar si al final él realmente la quería o era cuestión de no haber cultivado el amor. Al final no sé si he entendido muy bien lo que es el mensaje del corto.

MOM: El mensaje del corto es que no se necesita amar para ser feliz, ese es el mensaje fundamental, y que el amor a veces no hace feliz, a veces el amor hace muy desgraciadas a las personas. Ella dice: "Y te amo tanto que con rencor te amaba".

P: A lo mejor es porque no ama bien.

MOM: No, es que si no se goza no se ama bien, si no se es feliz no se ama bien.

P: ¿Qué significado tiene entonces cuando toman lo que es el fruto del futuro y el té del pasado?

MOM: Él toma el fruto del futuro y se siente muy bien; ella toma el te del pasado y se siente muy mal. Eso quiere decir, lleva el mensaje de que el pasado no es bueno para nadie, que es mejor elaborarlo u olvidarlo, el pasado. Que la felicidad está en el presente y en el futuro. Que en el pasado está la infancia, la vieja familia, los escollos marinos... sí, todo lo que usted quiera.
Para ser un buen neurótico hay que vivir en el pasado; una persona que vive el presente y el futuro no tiene enfermedad o tiene un grado mínimo de enfermedad. No sé si está claro.

Los psicoanalistas, yo trabajé 50 años como psicoanalista, vivimos del pasado, de la angustia que produce el pasado. Por eso, el consejo es que hay que librarse del pasado.

P: Vivir el presente.

MOM: Hay que vivir el presente, planificar el futuro, porque si no hay planificación del futuro tampoco hay goce, porque no hay ningún Estado, no se conoce ningún Estado actual que piense la felicidad del ciudadano. Por lo tanto, si el ciudadano no proyecta su futuro, no puede ser feliz. Es decir, que la felicidad es un trabajo, es la realización de un trabajo, en conjunto entre dos o más personas. Y si no, no hay felicidad, no hay programa de felicidad en ningún Estado del mundo.

En la sociedad del confort es donde existe la mayor tasa de suicidios. Ésas son las sociedades del confort que ahora ya no son tampoco las sociedades del confort, porque se han venido abajo.

El dinero es de quien lo piensa. Usted me dice "no, pero el trabajador..." Hay trabajadores que pueden pensar el dinero y no sufren tanto con su salario pobre, no son pobres aunque el salario sea pobre y, en cambio, hay ricos que son pobres. Quiere decir que el dinero debe ser pensado y, si usted no piensa el dinero, el dinero lo piensa a usted, que es una cosa terrible. Es así con el amor, con el deseo con el goce, con el sexo...

El sexo trajo el sida, el sexo no pensado trajo enfermedades terribles, así que el sexo debe ser pensado, el amor debe ser pensado.

Y después, la primera pregunta sobre el amor... A mí siempre me llamó la atención esa pregunta, ¿qué decimos cuando decimos que amamos? Por ejemplo, estar enamorado es terrible, porque estar enamorado es más que amar, estar enamorado es meterse al ser al amante dentro de uno y representa el yo de uno mismo, el amante. Por lo tanto, en realidad, estar enamorado es el grado de esclavitud máximo, no existe un grado de esclavitud, ni entre los antiguos esclavos, que sea tan grande como el enamoramiento.

Una definición del amor es darle lo que no tengo a quien no soy. Por ejemplo a la mujer no le tengo que dar el sexo masculino, le tengo que dar el sexo femenino, que es lo que no tengo y no soy, la mujer al hombre no le tiene que dar el sexo femenino, le tiene que dar el sexo masculino, que es lo que ella no tiene y no es. Esa es una metáfora bastante posible del amor.
En cambio, el enamoramiento es una ceguera, el enamorado es celoso, es paranoico, es envidioso.

El amor es libertario, si yo la amo a ella, lo único que ambiciono es su felicidad. No me importa si es conmigo o con Dios, no me importa, me importa que sea feliz, eso es el amor. El amor por lo hijos: me importa que mis hijos crezcan libremente, hermosamente y de manera grandiosa, conmigo o sin mí, ése es el amor. En cambio, en el enamoramiento mis hijos son mis hijos, tienen que tener la educación que yo tengo, tienen que vivir como yo vivo... Insoportable.

Hoy estuvimos hablando de los jóvenes que se llevan mal en el colegio, que abandonan los estudios, es por la cantidad de reglas que tienen que observar, la cantidad de reglas genera en el adolescente una rabia que, como son jóvenes y no están bien educados, la rabia se traduce en hacerse daño. Entonces, no es que prueben la droga, se envenenan con la droga, no es que prueben un vaso de alcohol, se envenenan con el alcohol. Pero eso es de rabia, rabia contenida, rabia por no poder librarse de las preceptivas de los padres de los maestros, de los educadores. Que, de paso, si los educadores no se psicoanalizan, no hay ley de educación que salve a los chavales, porque son envidiosos, los profesionales son envidiosos, los educadores son envidiosos y, para ser un buen maestro, no hay que envidiar, hay que gozar con el crecimiento del otro, lo mismo que para ser un buen amante hay que gozar con la libertad del amante.

Además, tener todo el tiempo una persona con uno, que eso es el enamoramiento, es una cosa terrible porque ¿quién aguanta a una persona todo el día con uno? Nadie aguanta, para aguantar hay que hacerse el indiferente, el tonto. Si tengo la presencia del otro constantemente es insoportable.

Además, poder separarse y encontrarse con el otro es la forma más bonita del amor, no tener miedo, no tener paranoia de separarme porque me voy a volver a encontrar, esa felicidad del encontrarse.

Yo sé que no se piensa así, pero sería conveniente que empezaran a pensar así para sufrir menos.

La medicina actual, toda la medicina actual, el psicoanálisis incluido dentro de la medicina actual, están ahora preocupados por el dolor, es lo único que les preocupa porque se ha llegado a conclusiones terribles: el infarto de miocardio no mata porque frena la circulación sino que mata por el dolor y así un montón de enfermedades. Evidentemente, el dolor es una preocupación.

Todos estos consejos que yo doy son para que no duela, para que dé goce el amor, no para que duela, para que la amistad dé goce.

Hay un tango que dice "todos sabemos cómo los jueces y los amigos han nacido para fallar". Entonces, si no me cuido de los amigos, termino siendo traicionado por los amigos. El tango sabe más que nosotros.

El mensaje del corto es ése. Porque él le dice la palabra "mi amor" al final, que quiere decir que siguen en relación, él lo que no soporta es el cuidado exagerado de ella, porque el cuidado exagerado hace que él se sienta un inútil, un enfermo. Y aunque uno esté enfermo, si lo cuido mucho lo hago sentir más enfermo. La manera de hacerlo sentir un poco más sano es cuidarlo un poquito menos, no descuidarlo, porque eso es falta de amor, pero cuidarlo con exageración enferma más.

Cuando estoy encima de los niños, por ejemplo "no te muevas" y al niño lo encuentro en el alambrado; cuando le digo "haz lo que quieras", cuando vuelvo está en el mismo sitio.
Hijo "espérame" y el niño espera, si le digo "no vayas al alambrado", le veo trepado al alambrado aunque esté electrificado el alambrado.

No es que se diga que nos educan mal, nos educan muy mal. Nos educan con una moral antigua, porque ningún educador tiene la moral que le quiere inculcar al niño. No habría contradicción, el niño vería que lo educan mal pero que el educador cumple con la moral, pero no es así, generalmente los educadores son unos inmorales que quieren que el niño sea moral.
Yo soy muy cristiano, estoy bautizado, hice la primera comunión, fui monaguillo pero lo que está pasando actualmente en la iglesia es desastroso, perdón por decirlo pero es esto: son educadores que rompen la ley de la educación, que transgreden la ley de Dios, la ley del cristianismo... Bueno pero aquí les vemos, por eso que la poesía es salud.

P: ¿Hoy no nos lee un poema?

MOM: Sí, he traído unos poemas para leer.

P: ¿El hombre es una criatura que está capacitada para amar?

MOM: Sí.

P: ¿En todos los casos?

MOM: Sí, y la mujer también... El hombre está capacitado para amar, eso no quiere decir que todos los hombres manejemos la máquina de amar que poseemos de buena manera. Pero eso se llama neurosis, por eso hay tanto psicoanalista.

No es que esté descompuesta la máquina es que yo la descompongo a propósito.

El doctor hablaba de lesiones en los futbolistas, yo también estudié eso. A veces me lesiono porque no me gusta el entrenador, a veces me lesiono porque le quiero dar un disgusto a mi mamá, el caso de Riquelme, la mamá llora mucho con él porque se lesiona y como no tiene cómo hacerla enojar a la madre, entonces se lesiona. El hombre puede llegar a la autoagresión para joderlo al otro.

Ése es el espíritu humano, es muy sensible el espíritu humano, por eso no hay que hacerle al otro lo que no quiero que me haga a mí, porque si se lo hago me lo va a hacer. Entonces una buena educación sería hacerle al otro lo que yo quiero que me hagan y no que le hago al otro el mal y quiero que el otro me haga el bien, eso es imposible, imposible.

Yo tengo un verso que dice si no fuera por mí sería perfecto. ¿Se entiende ahora? No soy perfecto porque estoy yo.

www.menassacandidatopremionobelliteratura2010.com


viernes, 16 de abril de 2010

Málaga, 14 de abril de 2010. Presentación del libro "Poetas del fútbol" y del corto "El hortelano" en Ámbito Cultural

Libro "Poetas del fútbol" de Carlos Fernández
presentado por Helena Trujillo
Cortometraje "El hortelano" de Miguel Oscar Menassa
presentado por Manuel Menassa y Clémence Loonis
Ámbito Cultural de El Corte Inglés de Málaga
14 de abril de 2010 a las 19,30 h




miércoles, 14 de abril de 2010

Holanda y el debate sobre el suicidio legal a partir de los 70

En Holanda, un país donde existe la eutanasia, “cada año unos 400 ancianos se quitan la vida de forma violenta”. ¿Para qué quieren legalizar lo que ya está legalizado? ¿Qué encubre?

Como no quieren debatir sobre el suicidio, la causa de muerte más habitual en el mundo, debaten sobre el denominado “suicidio legal” y precisamente a los 70 años.

Podemos decir que no sólo encubren lo que preocupa a la población: el suicidio, sino que arremeten contra las personas de más de 70 años.

Nadie puede autodestruirse sin la fuerza añadida del deseo de destruir a un ser humano diferente de uno mismo. Existe lo que Freud denomina masoquismo primordial o pulsión de muerte, necesario para que la pulsión de vida mantenga sus límites en los cauces de la vida. Podríamos decir que todo suicidio es un homicidio vuelto sobre uno mismo.

Los hablantes por habitar el lenguaje saben que van a morir y por eso conocen el goce de vivir, porque es necesario saberse mortal para gozar, sin embargo todo lo que hace un ser humano suele ser para no saber nada de esa verdad, por eso gozar conlleva un pensamiento inconsciente sobre la muerte, algo que aquieta todo crecimiento, todo acercamiento a conversar. Esto nos permite pensar que los ancianos psíquicamente hablando serían las personas mas preparadas para gozar de vivir, y sin embargo la ideología les impone el deseo de morir, tanto la ideología de la especie (que considera que no están en edad reproductiva), como la ideología del Estado (que considera que no están en edad laboral), como la ideología de los intelectuales, políticos y escritores universitarios holandeses (que consideran su vida completada).

Crecer es un mandato social, pero nada en la sociedad está preparado para el crecimiento de sus niños, ni sus jóvenes, ni sus adultos, menos aún de sus mayores de 70 años.

En Holanda, donde se ha iniciado el debate para eliminar a los mayores de 70 años, antes que indicar tratamiento psicoanalítico para todas las edades, llega hasta la idea de proponer como título que obtendrían los nuevos sanitarios: “certificado de vida vivida. Su meta, lo dicen claramente, es evitar el suicidio, la muerte violenta, que mostraba que estaban enfermos y sin tratamiento, como todo aquel que se suicida tenga la edad que tenga. Que “personas mayores y sanas no quieran sufrir por hacerse mayores” es indicativo de una estructura neurótica, y es un “sentimiento” que puede acontecer a cualquier edad.

Amelia Díez Cuesta

Psicoanalista del Grupo Cero

Independiente por la mañana

martes, 13 de abril de 2010

A PARTIR DE LOS SETENTA AÑOS, SI USTED TIENE GANAS DE SUICIDARSE, ANTES DE HACERLO, POR FAVOR, CONSULTE A UN PSICOANALISTA

En Holanda se está debatiendo si a partir de los setenta años, debe permitirse legalmente a las personas que no quieren seguir viviendo, quitarse la vida.

La depresión mata en el mundo más personas que todos los conflictos bélicos del planeta, es uno de los problemas más serios de salud en el momento actual. Podemos afirmar que no hay suicidio sin depresión previa, sólo los deprimidos se suicidan. Y la depresión, se cura con psicoanálisis.

La Presidenta de la asociación Por voluntad propia que es la que lleva a cabo la cruzada para legalizar el suicidio en “personas sanas”, dice textualmente: “Debe aceptarse que gente sana y cuerda no quiera sufrir por hacerse mayor”. El envejecimiento es un proceso fisiológico, no una enfermedad. Todos sufrimos los cambios y avatares de las distintas edades de la vida, y no por ello acabamos con nuestra vida. El suicidio es un acto egoísta, que no tiene en cuenta a los otros, a los demás. Una persona que dice no querer sufrir por hacerse mayor, ya está sufriendo, ya está deprimido, probablemente se ha deprimido frente a la pérdida de un ideal de juventud.

Además, tenemos que tener en cuenta la diferencia entre demanda y deseo. Decir: “me quiero morir” (demanda) no es igual y en ocasiones es diametralmente opuesto a desear morir (deseo). A veces quiere decir: “lo quiero matar al otro, al compañero, al familiar”, otras veces es: “quiero cambiar de vida, quiero acabar con este tipo de vida”. Sólo un psicoanalista puede escuchar, dependiendo de las otras frases que el paciente diga junto a esa frase, cuál es el deseo de ese sujeto. Y un hombre sano, no puede desear morir. Nadie desea su daño, y cuando se daña, siempre es para dañar a un tercero.

El drama más importante de la vejez es aprender a vivir a veces con achaques, tolerar que las personas queridas que rodean al anciano lo quieran perfecto y no con esos pequeños achaques. Parece que la familia prefiriera al anciano muerto antes que imperfecto. Se puede aprender a vivir una vejez feliz, a pesar de los años, de las arrugas, de los achaques. Antes de acudir a una de esas clínicas de suicidio asistido, si usted está pensando que la vida no tiene sentido y que es mejor acabar, que ya hizo todo lo que tenía que hacer, no se deje engañar, como dice el poeta César Vallejo, “hay señores, muchísimo que hacer”, consulte a un psicoanalista. Todo tiene remedio, menos la muerte.

Alejandra Menassa de Lucia
Psicoanalista del Grupo Cero
Independiente por la tarde